Desde lo alto de la montaña, además de ver las canteras de pizarra también pude ver el lago de La Baña, clasificado como Monumento Natural. Aprovechando las diversas rutas que había y el buen día que hacía nos acercamos hasta él. Es un lago precioso, situado en un valle, rodeado de montañas. Es un lugar tranquilo en que puedes disfrutar de la naturaleza y del aire fresco.
Según cuentan algunas leyendas, un pastor ahogó en él a las cabras de su vecino. Éstas le reclamaban insistentemente y al no poder resistir su llamada acabo tirándose al lago. Según dicen en las noches de luna llena aún se escuchan esos lamentos.
Según cuentan otras se originó como castigo a un campesino del vecino pueblo de La Baña por trabajar en día santo.
Os invito a conocer nuestro Bierzo. Podréis disfrutar de cosas tan maravillosas como éstas. ¿A quién no le gustaría darse un paseo y pasar una buena mañana aquí?
No hay comentarios:
Publicar un comentario